En el desafortunado evento de un accidente automovilístico, la atención inmediata suele centrarse en daños visibles y lesiones evidentes. Esto significa que, si la víctima del accidente no siente dolor y piensa que no sufrió ningún daño físico, podría evitar buscar atención médica para ahorrar tiempo y dinero.
Sin embargo, existen lesiones que pueden no manifestarse de inmediato pero que tienen un impacto significativo en la salud a largo plazo. Estas se conocen como “lesiones invisibles” y destacan la importancia de realizar chequeos médicos exhaustivos después de un accidente, incluso si inicialmente no se experimenta dolor o malestar.
La importancia de detectar lesiones ocultas
Muchas veces, el cuerpo humano responde al trauma de un accidente con una oleada de adrenalina que puede enmascarar el dolor temporalmente. Esto puede llevar a que ciertas lesiones, como conmociones cerebrales, lesiones en tejidos blandos o hemorragias internas, no se detecten de inmediato. De hecho, a veces hay condiciones severas que no se manifiestan hasta varios días o semanas después del accidente.
Según el Departamento de Salud de Texas, es crucial buscar atención médica tras un accidente para identificar y tratar estas lesiones de manera oportuna (enlace en inglés). Algunas condiciones, como lesiones traumáticas cerebrales, pueden empeorar con el tiempo sin tratamiento inmediato.
La detección temprana no solo mejora el pronóstico de recuperación, sino que también documenta la existencia de las lesiones, lo cual es vital para cualquier reclamación legal futura. Un pronóstico temprano de un doctor puede ser la evidencia clave que hace toda la diferencia en una acción legal por compensación. Contar con un informe médico detallado y oportuno es fundamental para garantizar que se reciban las compensaciones adecuadas por las lesiones sufridas.
Protección física y legal
Una evaluación legal por un abogado con experiencia en accidentes automovilísticos también es crucial para identificar y conservar la evidencia clave que podría necesitar para tener éxito en su búsqueda de la compensación adecuada. Un abogado podrá ocuparse del papeleo y las negociaciones con la aseguradora, además de cualquier acción legal que resulte, mientras que usted se concentra en recuperarse de sus heridas.
Por lo tanto, siempre es recomendable actuar con prudencia y asegurarse de obtener una evaluación médica y también una evaluación legal cuanto antes. Esto le ayudará a cuidar no solo de su bienestar físico, sino también de la protección de los derechos en cualquier procedimiento legal relacionado con el accidente.